Nos mantenemos abrazados en la ventana, nos ven desde la calle: tiempo es de que se sepa, tiempo es de que la piedra pueda florecer, de que en la inquietud palpite un corazón. Tiempo es de que sea tiempo. Es tiempo.
martes, 27 de enero de 2009
Veras la luz cuando menos te lo esperas...
Persiguiendo los restos de un sueño, el cielo clarea poco a poco. Tenemos un Cielo tan piadoso, que no envía el daño sin el remedio, nadie pudo ver el cielo sin elevar la mirada y el corazón a cada latido amanece en una esperanza nueva que tiene algo del cielo. Y ya no sé si a ti te estoy mirando, o si contemplo el cielo.
La vida es toda una lucha, cuya palma triunfal está en los cielos.
Mi testigo es el cielo vacío...
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